En una información divulgada por el propio departamento, la semana pasada, se explica que estos aparatos ya “están reemplazando a los helicópteros australianos MRH-90 Taipan en un cronograma más rápido de lo normal”.
El alto directivo afirma que el personal implicado en el proyecto “trabaja incansablemente” en una iniciativa “que proporcionará a Australia un buque de guerra multimisión líder en el mundo, altamente capaz y versátil”, y echa de menos que se comente con más frecuencia que el “Hunter ha sido diseñado para adaptarse a tecnologías emergentes, o mejorar la efectividad de la guerra en caso de que haya una amenaza mayor para nuestro entorno estratégico”.
Una pasa por la construcción en España de los barcos, que serían similares a las que ahora fabrica el astillero de San Fernando (Cádiz) para Arabia Saudí, y que se entregarían en 2029 por un coste estimado de 600 millones de euros cada una.
Estos contratos por un total de 4.000 millones “harán avanzar el programa a través del diseño, creación de prototipos y compra de componentes principales de largo plazo para los primeros submarinos del Reino Unido, lo que permitirá que la construcción comience en los próximos años y garantice la estabilidad y resiliencia de nuestra cadena de suministro nacional”.
380.000 horas de vuelo También aprovecha para recordar que el modelo está disponible en dos variantes principales: una especificada para operaciones navales, el NH90 NFH (helicóptero fragata de la OTAN), y el TTH (helicóptero de transporte táctico), configurado para el desarrollo de operaciones terrestres.
El Departamento de Defensa de Australia ha decidido retirar inmediatamente su flota de helicópteros MRH90 Taipan (variante local del modelo europeo NH90), quince meses antes de lo previsto, tras el accidente que sufrió una de las aeronaves el pasado 28 de julio, en la que murieron cuatro militares.
El proyecto ha llegado a la Comisión Nacional de Anticorrupción australiana después de que el auditor general revelase en un informe que los funcionarios implicados no han conservado los documentos que justifican la decisión de adjudicar los trabajos de este programa Sea 5000, como se denomina oficialmente, a un diseño no probado, a diferencia de las ofertas que en su momento presentaron la italiana Fincantieri y la española Navantia. Esta última, además, gozaba con la ventaja de que la RAN ya cuenta con buques similares (clase Hobart), lo que ha alimentado las voces que, frente a los problemas de diseño y los retrasos del candidato elegido, piden como alternativa adquirir más unidades de este tipo.
El papel como diseñador de sistemas de plataforma para la modernización del sistema de combate de Navantia Australia incluye “el desarrollo y la coordinación de los aspectos de diseño del sistema de plataforma; el desarrollo de los productos de diseño de la instalación del buque, incluyendo los planos de ingeniería del buque y los paquetes de alteraciones del buque; y los artefactos de cambio de ingeniería relacionados, asegurando la coherencia en la línea de base de los requisitos de la plataforma”.
Sin embargo, Madrid acabó renunciando a la operación para la compra de unos misiles que también se ha esgrimido que podrían equipar a los nuevos submarinos S-80 de la Armada española, y que precisan del apoyo de una red de satélites para poder operar.
Compra aún en negociación “Con su blindaje, cañones y misiles de última generación, el vehículo Redback brindará la protección, la movilidad y la potencia de fuego necesarias para transportar y proteger a los soldados en combate cuerpo a cuerpo, brindándoles la mayor posibilidad de lograr su misión y regresar a casa de manera segura”, afirman los responsables del ministerio en el comunicado en el que han revelado su decisión.
Australia ha anunciado la compra de una veintena de aviones de transporte militar C-130J Super Hércules para sustituir a la docena de aparatos más antiguos del mismo modelo con los que cuenta actualmente la Real Fuerza Aérea Australiana (RAAF), y que comenzaron a operar en 1999.
Rusia prácticamente ha dejado de ser un adversario para Estados Unidos, lo es para Europa, pero a China le viene que ni pintado que los esfuerzos de la Alianza Atlántica, de la OTAN, se focalicen durante años en Ucrania y en la defensa colectiva en el Este de Europa y dejemos de lado su posible expansión hacia el Indo-Pacífico.
En la misma línea, el Ministro de Industria de Defensa, Pat Conroy, ha evidenciado que en su departamento están “entusiasmados de que los Boxer fabricados en Brisbane, utilizando proveedores australianos, sean utilizados por el Ejército Alemán”.
Una de las fuentes consultadas por el citado medio, y cuya identidad no revela, explica que los aparatos podrían estar operativos en cuatro meses para ayudar a Ucrania a repeler la invasión rusa.
Una pasa por la construcción en España de los barcos, que serían similares a las que ahora fabrica el astillero de San Fernando (Cádiz) para Arabia Saudí, y que se entregarían en 2029 por un coste estimado de 600 millones de euros cada uno.
“De esta forma, la solución proporciona a la RAAF una capacidad de despliegue crítica para apoyar con seguridad los vuelos entrantes en el caso de que la infraestructura de gestión del tráfico aéreo no exista o haya sido dañada en una guerra o por un desastre natural”, señala Indra. Los dos sistemas consisten en un radar 3D de medio alcance desplegable y transportable, de la familia de radares Lanza de Indra, totalmente integrado en un Centro de Control de Área (ACC) móvil.
“Rheinmetall ha acogido con beneplácito la carta de cooperación entre Alemania y Australia para avanzar en una propuesta para construir vehículos de combate Boxer en Australia para exportarlos a Alemania”, recoge textualmente la compañía en un comunicado.
En palabras del director general de Indra Australia, Tehmur Khan Galindo, la solución entregada por su compañía “reemplazará la capacidad anterior de la Fuerza Aérea [Australiana] y brindará una mayor flexibilidad y opciones de despliegue, brindando mejoras importantes en la gestión del espacio aéreo y los aeródromos desplegados”.
Artec fue creada en 1999 conjuntamente por las compañías alemanas Krauss-Maffei Wegmann (KMW) y Rheinmetall, precisamente para desarrollar el programa Boxer, destinado originalmente a suministrar a los ejércitos de Alemania, que hasta el momento ha adquirido algo más de 400 unidades, y Países Bajos, con 200.El ministro australiano de Industria de Defensay el secretario de Estado parlamentario alemán de Defensa firman una carta de cooperación sobre la producción de Boxer Foto: Nicole Mankowski – Departamento de Defensa de Australia En 2016 Lituania firmó con Artec y Occar la compra de 88 blindados 8x8 Boxer, por 386 millones de euros, para sustituir su flota de blindados M113.
Los submarinos de propulsión que se van a construir para Australia en virtud del acuerdo que el país ha alcanzado con Reino Unido y Estados Unidos, estarán propulsados por motores Rolls-Royce.