Este último es una versión operativa e integrada en el Ministerio de Defensa en el marco del programa Rapaz con un acuerdo vigente durante este año y el siguiente, según explica la empresa.
En la actualidad, su munición de 30 mm está en servicio en, prácticamente, todos los usuarios de este calibre en la OTAN, incluidos el Ejército y la Armada de Estados Unidos.
Protección en zona de operaciones El ministerio destaca que la defensa antiaérea constituye una de las capacidades militares clave para la defensa nacional.
La cuenta de Youtube de la misión EFP ha mostrado recientemente a estos vehículos en acción en un ejercicio con fuego real en el campo de maniobras próximo a la base letona de Adazi, donde se encuentra el destacamento español.
Si se tienen en cuenta solo las cifras del primer semestre de 2022 –las últimas que ha publicado en su web la Secretaria de Estado de Comercio-, en los primeros seis meses del año pasado España exportó material de defensa a Ucrania por 18,2 millones y autorizó 12 licencias, es decir, dio el visto bueno a contratos, por 210 millones.
En clave nacional, la empresa, la única que fabrica en España munición de carro de combate, tiene previsto presentarse al concurso de proyectiles de 120 mm que el Ministerio de Defensa espera lanzar el año que viene.
La llamada de la UE y la OTAN para que los países que están ayudando a Ucrania en su esfuerzo de guerra incrementen su producción de municiones de gran calibre, tanto para surtir al país como para reponer sus arsenales, está surtiendo efecto.
La compañía, con clientes en más de 60 países, también expone en su stand (12-B25) su cartera de municiones, una de las más amplias y versátiles del mercado, que seguirá, subraya la firma, evolucionando en alcance, precisión, efectos y seguridad. Expal destaca su munición de familia de alto rendimiento ER02A1 de 155 mm con un alcance de hasta 40 km, en servicio en el Ejército de Tierra español, que cumple con los estándares más exigentes de la OTAN. La empresa también ha lanzado iniciativas para desarrollar conjuntamente con otras empresas una espoleta de corrección para munición de 155 mm. Foto: ExpalEn cuanto a los sistemas de armas, la empresa explica que su propuesta "se centra tanto en la satisfacción de las necesidades operativas como en aspectos de soberanía tecnológica y desarrollo industrial, en colaboración con empresas referentes a nivel mundial". En el ámbito naval, Expal desarrolla municiones de 76 mm y 5"/127 mm con espoleta de proximidad, mejorando las capacidades de guerra antiaérea (AAW) a bordo, específicamente contra misiles del tipo 'rozaolas'.La compañía, inmersa en un proceso de venta a la alemana Rheinmetall, diseña, fabrica y valida todos los componentes clave de la munición como espoletas, vainas, cebadores y cargas propulsoras, lo que garantiza la máxima calidad, seguridad y eficacia logística.
La empresa es la filial en España de la multinacional noruega Nammo, que desde 2013 gestiona las instalaciones de la antigua Fábrica de Armas de Palencia. Por último, la Fábrica de Municiones de Granada, empresa propiedad desde mayo de 2020 del grupo eslovaco MSM. En este caso, la compañía, ubicada en las instalaciones propiedad del Ministerio de Defensa en el barrio granadino de El Fargue, está especializada en la fabricación de munición de gran calibre de 105 y 120 mm para carros de combate, pólvoras para calibres medios, y misiles y componentes de misiles. La industria de defensa española, a la vista está, podría tener un papel destacado en los planes de compras conjuntas de la Unión Europea en proyectiles de 155 mm, con Expal, pero también en otras municiones muy demandas en la actualidad como la de carro de combate de 120 mm o incluso en las ligeras para fusiles y ametralladoras.
El proyectil, en este caso, describe una parábola ascendente para salvar el obstáculo y, en el descenso, retrocede para atacar el blanco (ángulo de tiro modulable)".
Esta situación de contingencia ha puesto de manifiesto la necesidad de reforzar a nivel conjunto los stocks de material y de municiones para hacer frente a un mayor consumo derivado de la mayor actividad de la Fuerza y los posibles envíos de ayuda de material a Ucrania", argumenta.Defensa busca "cumplir no sólo con las diferentes misiones que tienen encomendadas las diversas unidades del Ejército de Tierra y los planes de instrucción y adiestramiento correspondientes, sino también con los apoyos internacionales comprometidos por España en el escenario geopolítico actual".
El informe no aclara si los más de 200 millones de euros son solo ventas por parte de la industria de defensa, es decir, contratos al uso, o si también incluyen el valor de las donaciones de material y armamento que el Ministerio de Defensa ha efectuado desde el pasado mes de febrero en diferentes envíos a Ucrania, entregas que también han pasado por la lupa de la Jimddu.
Mientras que la Armada ha encargado recientemente munición para sus obuses y naval para los cañones de las fragatas F-100.
La Unidad de Buceo de Cádiz (Unbudiz), parte de las Unidades de la Fuerza de Acción Marítima en Cádiz, con base en la Estación Naval de Puntales, desactivó el pasado 9 de noviembre un proyectil contracarro de 106 mm de calibre frente al puente nº6 de la playa de Camposoto en San Fernando (Cádiz).El Cuartel General de la Fuerza de Acción Marítima, a través del Centro de Operaciones y Vigilancia de Acción Marítima (Covam), reunió a un equipo de especialistas en desactivado de explosivos, encargado de identificar y neutralizar el proyectil tras recibir el aviso.Una vez desactivado, la Unidad de Buceo de Cádiz trasladó el proyectil a una zona segura para su neutralización, con la ayuda de la Policía Nacional de San Fernando, que proporcionó todas las medidas de seguridad necesarias en el perímetro de acción.Después, el equipo de explosivos limpió la zona donde se encontró el proyectil para dejarla libre de restos para evitar cualquier tipo de impacto medioambiental.El equipo de desactivado de la Unidad de Buceo de Cádiz ya ha realizado un total de 11 intervenciones desde el pasado mes de febrero, neutralizando más de 25 artefactos explosivos y bengalas.
El de munición de 155 mm tiene un importe de 5,5 millones y el de granadas de 4,5 millones.
Uniformes de invierno, TOA, entrenamiento... Junto con la munición, España ya ha entregado una parte del material y los uniformes de abrigo prometido.
La nota no menciona en qué sistema de artillería será empleada esta carga modular, definida como “innovadora y competitiva” por Eurenco, aunque hace referencia a que está en servicio en el ámbito de la OTAN sin especificar el país de destino. Esta carga modular, explica su fabricante, es el resultado “de los conocimientos, la experiencia y la innovación de los equipos de Eurenco de Bergerac (Francia) y Karlskoga (Suecia)”.
"Este nuevo acuerdo entre Expal y Thales no solo proporcionará a la RAN un mayor acceso localizado 'bajo demanda' a la tecnología 5” líder Expal-Thales, sino que también dará una mayor certeza de suministro para la capacidad crítica de municiones de 5”", subrayan las empresas. Expal y Thales también han acordado un amplio programa de investigación y desarrollo, que incluye una hoja de ruta a la Fuerza de Defensa de Australia para la mejora de la tecnología de municiones de 5” en las plataformas actuales y futuras de la RAN, incluidas municiones que ofrecen mayor alcance, sensibilidad reducida y capacidad de ataque de precisión. El vicepresidente de Sistemas Terrestres de Thales Australia & New Zealand, Corry Roberts, apuntó que “durante los últimos 12 meses, hemos establecido asociaciones significativas con algunos de los proveedores de municiones más destacados del mundo, incluido Expal, para fomentar la transferencia de tecnología a Australia y establecer la capacidad de producción local de municiones críticas.
El centro está especializado en la fabricación de componentes metálicos –vaina y el propio proyectil- para municiones de medio y gran calibre.Las instalaciones han recuperado los niveles de actividad previos al cese de la producción en 2020.
“La munición base bleed la peculiaridad que tiene es que tiene un dispositivo en la base del proyectil que calienta el aire que genera el proyectil en su trayectoria y reduce la resistencia y con ello ganamos alcance; más de diez kilómetros, con lo cual una mejora importante para la unidad”, explica el capitán Bedia del Grupo de Artillería de Campaña I/11 (GACA I/11) en el último informativo del Ejército de Tierra.