Defensa extiende hasta 2036 la concesión a la eslovaca MSM para producir munición en Granada

El Ministerio de Defensa ha decidido ampliar la concesión al grupo eslovaco MSM para producir munición hasta 2036 en las instalaciones de la actual Fábrica de Municiones de Granada (FMG).  

Así lo ha confirmado esta semana el embajador de Eslovaquia en España, Juraj Tomaga. El acuerdo entre el departamento que dirige Margarita Robles, propietario de las instalaciones, y MSM, conglomerado industrial que controla FMG desde 2020, garantiza el futuro de la compañía española a medio y largo plazo. La concesión es ampliable, es decir, ambas partes podrán renovar el acuerdo de gestión de las instalaciones más allá de 2036.  

FMG, ubicada en el barrio granadino de El Fargue, está especializada en la fabricación de munición de carro de combate de 105 y 120 mm, de artillería de 155 mm y también de mortero de 60, 81 y 120 mm. Además, produce pólvoras para calibres medios, y misiles y componentes de misiles. En España, es la única compañía que fabrica munición de carro de combate.  

En la actualidad, la compañía tiene contratos con el Ejército de Tierra para el suministro de munición para el vehículo de caballería Centauro y cargas explosivas para ingenieros. También participa en el programa para la producción en España del nuevo misil Spike LR2 para las Fuerzas Armadas.  

Incremento de la producción  

La fábrica granadina ha incrementado en los últimos meses la producción, sobre todo, de munición de artillería de 155 mm y tiene al 100% de capacidad su línea de este calibre, con una plantilla que ronda los 120 trabajadores. Detrás de este aumento de la actividad se encuentra la guerra en Ucrania, pero también los planes de la mayoría de los ejércitos occidentales, impulsados a lo largo de 2022, tras la invasión rusa, para reforzar sus stocks de munición y las reservas estratégicas. 

El grupo eslovaco MSM adquirió en 2020 a Santa Bárbara Sistemas el cien por cien de la actual FMG, compañía con más de 600 años de historia. El acuerdo para el traspaso de las instalaciones se formalizó en concreto en mayo de ese año, con algo de retraso por la pandemia de la Covid y tras el visto bueno del Ministerio de Defensa español.